Salomé generó una enorme polémica, ya que hay escenas escandalosas, como la danza de los siete velos, un striptease precursor, y sobre todo necrofílicas. Salomé , en el culmen de su locura de amor, besa la cabeza cortada de Yokanan Juan el Bautista).
La obra original de Wilde contó con la maestría de las ilustraciones de Aubrey Beardsley, pintor y poeta , que utiliza el blanco y negro para componer estilizadas figuras que se recortan sobre un fondo de decorado plano. Esta estética utiliza los recursos del japonismo, como la línea ondulada, la ausencia de perspectiva , la diagonal y el silueteado.
Beardsley ."Salomé besa la cabeza de Yokannan".
Oscar Wilde escogió un tema bíblico al que despojó de todo afán moralizador. Por el contrario, sus escritos defienden el “arte por el arte”, es decir, que la belleza era la esencia de la creación artística. En Salomé, la lucha es entre el amor y la muerte, es decir, Eros y Thanatos, como fuerzas que definen el mundo.
Ambas obras son de Ferdinand Khnopff. En la primera , se ensalza la belleza , la segunda es una cabeza de MEdusa.(decapitada, por supuesto). Medusa es un tema que encaja muy bien, el de la mujer que por desafiar a los dioses es castigada a perder su belleza. En una sociedad que subastaba la belleza femenina, es un castigo terrible.
El amor y la muerte son temas eternos.Pero ,en el arte del fin de siglo, como vemos, hay temas recurrentes, los arquetipos de mujer.
En la Salomé de Klimt, su naturaleza depravada aparece representada por su desnudez y sus manos como garras, Como si fuera una encarnación mitológica , sujeta la cabeza del Juan el Bautista.
Jan Toorop. "LAs tres novias". La mujer tradicional, cubierta. Las mujeres desnudas que las rodean oscilan entre la seducción ,con su desnudez y la muerte. Parecen arrastrar a los personajes centrales a ultratumba.
Cierro la puerta tras de mí, de Khnopff.
Basado en un poema de Cristina Rossetti, que habla del aislamiento en el mundo interior, la imagen nos resulta bella pero inquietante.
Las causas de este cambio de mentalidad , frente a la mujer familiar que veíamos en los impresionistas, tienen que ver con la literatura. Dos obras, "Contra Natura"de Huysmann y "EL vicio supremo " de Peladan ,propagaron el esoterismo y el decadentismo. De hecho, las mujeres de esta época parecen estar entre dos mundos. Además es el momento de la "Doctrina secreta" de Madame Blavatsky, una célebre médium que puso de moda el espiritismo en toda Europa.
Pero además hay un problema de mayor calado. Erika Bornay, en su interesante libro “las ¨hijas de Lilith” expresa la convicción de que son los cambios que se producen en relación con el papel de las mujeres en la sociedad, donde está el origen de estos temas artísticos.
Rossetti, "Lady Lilith"
La precursora fue Mary Wollstonecraft, que en su “Vindicación de los Derechos de la mujer”, de 1792, criticaba cómo eran tratadas las mujeres en su momento, su falta de derechos, poco acceso a la educación y su papel decorativo. Mary fue reivindicada un siglo más tarde como la precursora del feminismo. Y casualmente, el feminismo puede decirse que toma cuerpo hacia mediados del siglo XIX. Antes de que acabe el siglo, las mujeres ya pueden votar en el primer país del mundo que lo permite, Nueva Zelanda.
La tesis de Bornay es que la mujer asertiva, que toma iniciativas para conseguir lo que desea, y no acata el mundo de los hombres , es una amenaza y lo ha sido siempre. Por ello recupera la figura de Lilith, que según algunas versiones de la Biblia fue la primera mujer de Adán, pero no se sometía a él, por lo que fue desterrada. Se le mandó a Eva que era más amable, aunque sin duda una lianta. Y para conjurar el miedo a esa mujer con decisión , la tendencia artística es sublimarla en personajes atrayentes pero negativos, como Vampiros ( Drácula es una obra de 1897), fantasmas, bailarinas necrófilas, y personificaciones de la muerte.
Toda una colección de arquetipos con un parecido común: atraen al tiempo que repelen. Recogen la herencia romántica, la literaria de los prerrafaelitas, la decadentista.Y unos años después , lo retomará Freud.
El psicoanálisis interpreta el inconsciente con dos pulsiones básicas: Eros y Thanatos, Creación y Destrucción. Que deben al esteticismo decadentista sus más ilustradoras imágenes.
4 comentarios:
Muy estimulante el asunto que planteas. La mujer y su papel en la historia siempre fue un tema que me ha atraído, aunque a mi más que su papel simbólico siempre me interesó más su papel en la producción y en la intervención socio-política. No obstante esta visión es muy enriquecedora.
JV
Bozal mantiene que este prototipo de mujer-vampiro, seductora y asesina a su vez es una constante de gran parte del siglo XX y pone numerosos ejemplos (como el Munch que pones), los expresionistas alemanes, Picasso y sus terribles bañistas o incluso Duchamp y su novia-insecto de su Gran Vidrio.
Ya con el surrealismo esto llega a su culminación y merecería otro post tan fantástico como éste
Siempre ampliando campos y dándonos trabajo. Te devuelvo la pelota, ¿Por qué no le dedicas un post a ARtemisia Gentileschi?
Me fascina el mito de Eros y Thanatos.Encontré un corto que refleja muy bien esa lucha http://qualid.es/?id_pre=95 me llamó mucho la atención.Sigue con tu blog,lo haces muy bien.Un saludo.
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